Este mes personal del Servicio Provincial de Manejo del Fuego participó de una capacitación en quemas prescriptas, un tipo de quema con el que se busca disminuir el material combustible dispuesto sobre grandes superficies, que requiere de una planificación exhaustiva. Cuarenta y seis trabajadores de las brigadas de toda la jurisdicción participaron de 2 jornadas teóricas y una jornada práctica que tuvieron lugar tanto en El Hoyo como en Esquel.
La capacitación estuvo a cargo de profesionales del CIEMEP-CONICET y del área de Meteorología y Comportamiento del Fuego del SPMF. Los principales temas abordados fueron principios de la ecología del fuego; normativa sobre quemas; técnicas de ignición; tipos de quema; planificación de quemas prescriptas; y medidas para la disminución de riesgos ambientales y del trabajo. En la instancia práctica los conceptos fueron puestos a prueba en una plantación de pino ubicada en la Reserva Natural Urbana de Esquel «Laguna La Zeta». Se hizo una demostración sobre un cuarto de hectárea.
Una herramienta para la prevención
Las quemas prescriptas pueden reducir significativamente el peligro de incendios forestales, especialmente en zonas de interfase donde ambientes agrestes colindan con áreas urbanizadas. En esos sectores, la acumulación de material vegetal seco representa una amenaza directa para la población. Lo que se busca utilizando esa herramienta es reducir la carga de combustible de manera planificada y segura, para disminuir la probabilidad de que los incendios propaguen.
Por otro lado, el uso adecuado del fuego cumple una función ecológica clave en muchos ecosistemas naturales. En ciertos sectores de la cordillera chubutense éste propicia la regeneración de ciertas especies y mitiga las plagas, contribuyendo a mantener la biodiversidad. Así, utilizado con rigor científico el fuego puede ser un aliado para la prevención de grandes incendios forestales y para la restauración de ambientes degradados.